Esta es una pregunta que muchas personas ni siquiera se hacen al momento de querer cuidar apropiadamente una cartera de cuero o de limpiar bolsos de piel y, en la mayoría de los casos, terminan por darle un mal tratamiento al material.
Recordemos que la piel es un producto natural y, como tal, tiene algunas características que deben tomarse en cuenta antes de proporcionarle cualquier tratamiento específico.
En Belltower Spain somos especialistas en la confección de artículos de piel, más específicamente, carteras de piel para mujer y bolsos de piel para mujer, es por ello que ahora queremos explicarte como limpiar y cuidarlos apropiadamente.
Cada día hacemos esfuerzos por ampliar nuestro catálogo aún más, así que, si estás leyendo esto mucho tiempo después de su publicación, es posible que tengamos más productos de piel a tu disposición. Sin más que agregar, prosigamos.
Lo que no debes hacer al limpiar bolsos de piel.
Antes de explicar el proceso completo para limpiar apropiadamente los bolsos de piel, queremos indicarte lo que no se debe hacer bajo ningún concepto, pues perjudica la piel de la que están hechos los bolsos.
No uses aceites.
Lo primero que debes evitar al intentar limpiar bolsos de piel es aplicar aceites sobre los mismos, si bien es una creencia popular que el aceite le hace bien a la piel genuina, lo cierto es que no es así, por el contrario, puede manchar la piel, haciéndole perder su belleza natural.
Por otra parte, los aceites también pueden llegar a penetrar en los poros de la piel y producir olores desagradables, en algunos casos, haciendo que los bolsos queden inservibles.
Evita exponer los bolsos al sol.
Así es, evitar que los bolsos de piel se encuentren expuestos durante demasiado tiempo a la luz solar es otra forma de cuidar y de limpiar bolsos de piel.
La exposición prolongada a la luz solar ocasiona que la piel pierda sus niveles de humedad interna natural, ocasionando que la piel empiece a agrietarse y deteriorarse mucho más rápido de lo que debería.
Ahora bien, privar por completo de luz solar tampoco es una alternativa viable, pues si el bolso de piel absorbe demasiada humedad, terminará por desarrollar manchas y hongos producto de dicha humedad.
Un equilibrio en cuanto a la cantidad de luz solar que recibe es necesario.
Limpiar bolsos de piel paso a paso.
Ya hemos hablado sobre lo que no debe hacerse al intentar limpiar bolsos de piel, ahora conversemos de la forma correcta de hacerlo. Para ello, necesitarás 3 paños y un producto comercial de limpieza de piel o cuero.
Es importante que dicho producto sea exclusivamente para limpiar y dar brillo a productos de piel o cuero, pues si se trata de algún producto de limpieza genérico, es muy probable que terminemos arruinando un hermoso bolso de piel.
Aclarado esto, comencemos:
El primer paño se humedece en agua limpia, una vez humedecido se frota sobre la superficie del bolso, esto con la finalidad de limpiar cualquier cosa que se encuentre adherida al bolso de piel. Una vez limpio, se seca con otro paño o se deja secar.
Luego de que el bolso se encuentre totalmente seco, se aplica sobre sobre el bolso de cuero según las indicaciones del producto, por lo general, consiste en humedecer otro paño con el producto y frotarlo por toda la superficie de piel del bolso.
Este tipo de productos para limpiar bolsos de cuero o cualquier producto de cuero requiere de unos minutos para penetrar en la fibra de la piel, por lo que es bueno dejarlos reposar por al menos 30 minutos, algunas personas recomiendan 1 hora, pues durante dicho tiempo, la piel es humectada por el producto.
Luego de cumplir el período de reposo, se utiliza el tercer paño seco para “pulir” el bolso de piel, esto no solo le dará un brillo hermoso al producto, sino que también retirará los posibles excesos del producto de limpieza del cuero.
Eso es todo, ya sabes como limpiar bolsos de piel de forma correcta y sin arriesgar tus hermosas prendas de piel genuina.
Por último pero no menos importante, se recomienda que este proceso de limpieza se realice de forma periódica, cada dos meses es una medida apropiada para bolsos que tienen un uso cotidiano.